lunes, 1 de septiembre de 2014

Perfect woman: la oscilación entre mama y la top model.


Es típico del hombre dejar los ojos pegados en un culo o que se le pierdan en un escote. Y si, a veces hasta a las mujeres hay cosas que llaman la atención, que son tan grandes que no se puede "no mirar". 
Pero si una mujer "crítica", en envidiosa. Y cuales son las críticas de la mujer, o por lo menos las más frecuentes? "Es de plástico" "se mata en gimnasio, no debe hacer nada" "con esa ropa y todo el día en la peluquería yo estaría mejor" "...etcétera..." Hello! Wake up! No es envidia, es realidad. Una no puede con todo, la súper mujer, no existe. 
Según el diccionario de la cabeza masculina (aún no se sabe de cual), las cualidades abarcadas en el concepto de mujer perfecta son: buen culo, buenas tetas, buen cuerpo. Bonita, natural interesante, que se destaqué x su belleza pero no lo suficiente como para que "se la quieran quitar" (algunos especímenes no se han dado cuenta de que la mujer es un ser humano y por lo tanto no puede considerarse propiedad de otro. Que trabaje para que sea independiente y no tenga que mantenerla, pero no lo suficiente como para que "se le vaya". Que piense, pero no lo suficiente como para dejarlo o ganarle un debate. Que sea buena en el sexo, sólo con el, y que haya sido antes una virgen puritana. Obviamente, un factor principal: que lave, planche, limpie, cocine y sea una buena madre, tal como lo fue mama. 
Y así, el hombre está oscilando constantemente en dos imágenes contradictorias: la top model y la mamita hermosa. Oscilando, como un péndulo, va de una imagen a otra, de un estereotipo a otro, de una idealización a otra. Por cierto, contradictorias. 
Pierden los ojos x un culo y una par de tetas, pero si una quiere operarse"no, ni en pedo, es como plástico". Si una quiere renovar todo el ropero "es al pedo, si el ropero está lleno de ropa sin usar" y si una va a la peluquería, se corta, se tiñe y se hace todo lo que se puede hacer en una peluquería, llega y escucha "que hay de comer?"
A ver hombres, todo, no se puede. Elijan, o la súper sexy o la comparación de la comida d su mujer con la de su mama. Y si no se deciden, lo cual es lo más probable, busquen un buen psicoanalista que los ayude a lidiar con eso.
Mujeres, entiendan.. Ellos no lo van a hacer. Déjenlos perder los ojos en atributos ajenos, están en pleno conflicto aunque se creen que son re capos. Mente superior domina a mente inferior. Y si no pueden lidiar con esto, patada en el culo (a su hombre, no a la mina del buen orto) o un buen terapeuta..

El concepto de libertad: una cadena que ata

Según el diccionario, la libertad es la "facultad natural que tiene el hombre de obrar de una manera o de otra, y de no obrar, por lo que es responsable de sus actos".
Desde la más antigua historia, la humanidad anhela tener libertad, no estar atado, sentirse libre...
Pero qué es la libertad?
El concepto de libertad siempre estará ligado a las propias cadenas de cada ser humano.
Si le preguntamos a un esclavo, la libertad será el dejar de servir. Si hablamos con un adolescente, la libertad sería, posiblemente, la posibilidad de hacer lo que quiera como quiera, sin rendir cuentas a sus mayores. Si le preguntamos a un prisionero, será el abandonar la cárcel. Pero acaso el hombre que no es esclavo, que tiene libre albedrío, que no está en una prisión, es acaso un hombre libre?
Hemos creado la libertad, hablamos de ella, pero todos la sentimos diferente. Puedo pensar que la libertad no es más que una utopía, un deseo inalcanzable que cumple el rol de motor de la humanidad.
La libertad es una idea, no es tangible. La libertad es un deseo, utópico, irrealizable. Es un deseo, es algo que cambia su objeto de satisfacción de manera constante e impredecible. Todos somos presos, presos de aquel deseo que nos atormenta, de aquel recuerdo que nos lastima, de aquella anécdota nostálgica, de aquel miedo que no nos deja seguir avanzando.
El hombre es un ser social por naturaleza, que no puede desarrollarse bio-psíquica-socialmente sin vivir en sociedad. El hombre no es más que un ser sujeto a su derecho y obligación de comunicarse. Y esa comunicación, ese mensaje, está ligado a un lenguaje, y a otro ser que lo recibe, lo percibe, lo siente, lo interpreta.
La humanidad busca sentirse libre, pero sin embargo se ata a sus prejuicios y estereotipos, a esas clasificaciones tontas, a catálogos y etiquetas.... Se ata a esas categorías en las que no quiere estar.
Somos entonces seres libres? Nada más lejos de una platónica idea... Somos presos por naturaleza... Presos de un lenguaje, de una sociedad, de un sistema, de un anhelo imposible que nunca será satisfecho... Presos de una idea, de un concepto indefinido, que se siente y se percibe distinto por cada ser humano que habita en la tierra, una utopía, un deseo, una idea al fin...
La idea de la libertad, la cadena que más nos ata...